Poema de Enrique Amorim( Saltó, Uruguay)
Me desperté pensando en este poema de Enrique Amorim…
Primero de Mayo
El abuelo gringo que vino en un barco
de velas de fuego con mástiles blancos
–brújula embrujada mendrugos y endriagos–.
El abuelo gringo dijo por lo bajo:
Primero de Mayo
Recorrió la América numerando andamios.
Coloreó arrabales y fue, palmo a palmo,
corazones, tierras ganado. Ganando
mujer, casa y huerto para su descanso.
Primero de Mayo
Y encendió la pipa en medio del patio.
Hojas otoñales siguieron sus pasos.
Por la calle sola se alejó cantando,
con un libro viejo cerrando las manos.
Primero de Mayo
¿Los hombres temieron al fuego del canto?
¿Daban miedo entonces las voces en alto?
Hubo atardeceres de sangre y espanto.
Muros de ignominia y enlutado asfalto.
Primero de Mayo
La plaza cercada de sables y cascos.
El rencor roncaba su sordo fracaso.
El grito en el puño y el puño en lo alto.
Un clarín de muerte deshojó el espacio.
Primero de Mayo
Rosas renovadas en ocasos bravos.
Noches de la imprenta sudores lunados.
Rojos fueron siempre la aurora y el parto.
El nieto ya lee el viejo libraco.
Primero de mayo
Se abrieron las calles a punta de canto.
Las heroicas madres los hijos en brazos.
Vendaval de gritos, del grito sangrado.
Gargantas de acero: ¡Libertad hermanos!
Primero de Mayo
Banderas al viento tus fechas flamearon
por calles y plazas y sierras y campos
y montes y surcos y ríos y llanos.
¡Espigas y estrellas colmaron los labios!
Primero de Mayo
Ya nadie podría la fiesta quitarnos
¿Quién puede a los yunques? ¿Quién puede al arado?
¡Que claro es el día, qué día más claro!
Está amaneciendo
¡Primero de Mayo!
Enrique Amorim