De un océano que ruge
De un monte silencioso
Del árbol vivo sin hojas suicidas
Del humo de una fogata
De un silencio sin dueño
De un destino sin marca
De una paz prolongada
De recuerdos sin fotos
Entrar sin detenerme al sonido de mi sangre
Ser una sola cosa con el aire que me alienta
Olvidar el olvido
Deducir la muerte, entenderla
Abandonar a la otra que anda siempre buscando
Dejar mis ropas
Dejar mis llaves
Dejar mis miedos
De verdad necesito un poco de todo eso
O tal vez sólo un poco
Necesidad
