Mito de hombre lobo…

…era igual al mito y la leyenda y la película. Cuando llegaba el viernes de Luna llena el tipo se levantaba y se iba a las calles. Entre sombras le crecían los colmillos depredadores, las garras asesinas y los ojos lujuriosos. Se vestía de negro.

Su mujer quedaba dormida y ni sabía que el animal de su marido andaba por la noche, aullando y mirando la luna, comiendo cualquier cosa y tirando dentelladas a las jovencitas.

Al amanecer el hombre lobo volvía y se bañaba, prolijamente se acostaba y hasta la próxima luna llena del siguiente mes, se portaba como un señor cariñoso y cuidadoso.

Así anduvo haciendo el ridículo algunos tiempos, alguien escribió su historia y le inventaron más víctimas de las que hubo. Agigantaron su fiereza, dijeron lo que no vieron y el rumor creció con el espanto, porque suelen ser casi lo mismo.

Su mujer un día sábado despertó, le vió los pies sucios, encontró un pelo negro en la cama, entendió todo mal, hay mujeres muy cautelosas, se dedicó a espiarlo.

Pasó un mes casi entero sin dormir, espiando y fingiendo, algunas mujeres pueden hacerlo, hasta que vio la evidencia un viernes de Luna llena: su marido era el hombre lobo.

Con paciencia y sensualidad inusual ella se disfrazó de loba y salió a la noche a perseguirlo, lo atrapó entre sus garras, le gritó un par de aullidos, lo mordió en la oreja y zaz!… el hombre lobo volvió vencido y enamorado a dormir con su loba…

Desde esa noche, cada viernes de Luna llena aúllan bajo su luz, asustan a algún desvelado, se burlan de las leyendas y beben vino mientras hacen el amor como loba y lobo, sedientos…( lo demás es puro cuento)