Te estaba esperando , o acaso lo dudas?
Mi vida era una espera
Mi lucha era esperar
Mi aliento era estar esperando y
no lo sabía por eso,
cuando apareciste me asusté.
Soñaba con amantes fugaces
temía otro amor duradero.
Esperaba ver pasar los años sin
más pasión que mis hijos y sus hijos.
El trabajo como obligación y
alguna locura para no padecer de hastío.
Llegaste desde otro hemisferio
el real y el otro, el del recuerdo.
Renací en una semana, me lancé
desesperada al encuentro de lo que avizoré
como imposible. Llegaste,
a través de miles de palabras trasnochadas,
horas ganadas a la vida rutinaria que
nos agobiaba. Llegaste.
La risa que todo lo cura
puede ser una forma de amor y
me hiciste reír a carcajadas,
me alegraste tanto las noches
que regresé a la adolescencia.
Y qué locura de sensaciones en
tronchados chats donde la risa
anidó el romance que se nos desbordó
y ya nada pareció imposible.
Contar los días y después las
horas para el abrazo verdadero.
Delirar, no dormir, probarme ropa,
depilarme, acicalarme como novia nueva…
Ese dos de enero a las dos de la tarde
cuando nos abrazamos en medio
del gentío, el aeropuerto fue la ceremonia
de este amor que nos tuvimos,
que nos tenemos… este amor tan loco
que unió mapas y fronteras
recuerdos y realidades
Desamparados, nos socorrimos
Descarrilados, nos apretujamos
Desbordados, nos amamos
Volvimos a ser jóvenes y fuertes y lujuriosos.
Desafiamos a todas y todos.
Los dos contra la sociedad pacata,
nada ni nadie podría separarnos.
Había un largo camino para recorrer
estadías supremas y noches de paz y gloria.
Había también duelos, separaciones y olvidos.
Nos creíamos únicos como los amantes
de todas las novelas del mundo.
Nos parecía hasta lógico que tanto amor
generara tantas envidias y celos.
Éramos únicos, un amor de esencia y materia
sólo nuestro en su tipo.
Hoy, revisando esto, querido mío,
me da un poco de risa y de rabia,
sigo pensando que fuimos simplemente originales
Sigo pensando que más allá de este profundo sentimiento que nos une
Lo mejor aún fue el desafío que nos pusimos
que les pusimos
y que todavía nos proponemos en esta realidad
En esta sociedad que proclama libertades pero no la nuestra
Agitan banderas de modernismo supremo
pero nos siguen señalando
Sigamos amor
Al menos para criticarnos no seremos invisibles
Y el final será también uno así como de novela
A todo amor, dejando todo.
Pero eso ya lo sabes, nosotros jamás moriremos de otra forma.